Tiempo Ordinario
San Lucas Evangelista
Textos
Del evangelio según san Lucas(10, 1-9)
En aquel tiempo, Jesús designó a otros setenta y dos discípulos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares a donde pensaba ir, y les dijo: “La cosecha es mucha y los trabajadores pocos. Rueguen, por tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos. Pónganse en camino; yo los envío como corderos en medio de lobos.
No lleven ni dinero, ni morral, ni sandalias y no se detengan a saludar a nadie por el camino.
Cuando entren en una casa digan: ‘Que la paz reine en esta casa’. Y si allí hay gente amante de la paz, el deseo de paz de ustedes se cumplirá; si no, no se cumplirá. Quédense en esa casa. Coman y beban de lo que tengan, porque el trabajador tiene derecho a su salario. No anden de casa en casa.
En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman lo que les den. Curen a los enfermos que haya y díganles: ‘Ya se acerca a ustedes el Reino de Dios’ ”. Palabra del Señor.
Mensaje[1]
Hoy la Iglesia recuerda al autor del tercer Evangelio y de los Hechos de los Apóstoles. Según una tradición, era uno de los setenta y dos que Jesús envió. De hecho, su figura y su Evangelio se caracterizan por tener una fuerte carga misionera. Aquellos setenta y dos son el signo de una misión grande, abierta al mundo (setenta y dos eran las naciones del mundo, según una tradición judía), y Jesús los envía libres, sin pesos, sin equipajes llenos de cosas o ideas, sin prejuicios.
Van «como corderos en medio de lobos». Los discípulos tienen la misma vida que los hombres, que sus vecinos y amigos, pero al mismo tiempo tienen una vida profundamente distinta. El discípulo del Señor no puede aceptar la lógica del mundo; la lógica de la fuerza, de la violencia, que es una lógica, que es una lógica del lobo, más que de cordero.
El discípulo solo cuenta con la fuerza del amor. Por eso el fruto de la predicación será encontrar a «hijos de la paz» en las casas de los hombres. Y sabemos que en un mundo con tanta violencia, donde los hombres se ven tentados por una lógica de contraposición, por la idea de responder al mal con el mal, es necesario este Evangelio que tranforme el corazón de los lobos en corderos.
El Evangelio nos muestra el misterio gracias al cual, cuando la luz del reino parece más lejana, la oración, la esperanza y el amor de los discípulos la acercan y la hacen presente. Que Lucas nos ayude con su Evangelio a continuar la misión del reino en este mundo.
[1] Paglia, Vincenzo. La Palabra de Dios cada día – 2023. Edición en español. p. 366.