Aquí estoy, Dios mío; vengo para cumplir tu voluntad
Los sacrificios antiguos no salvaban de los pecados porque no transformaban el corazón del hombre, mientras que la participación en el «cuerpo» de Cristo en la Eucaristía transforma al creyente en el cuerpo mismo de Jesús que, resucitado, está a la diestra de Dios.
24 enero 2023. Textos bíblicos y mensaje del martes de la semana III del tiempo ordinario.