Rueguen al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus campos
El profeta Isaías, dirigiéndose a la comunidad que ha experimentado momentos de gran tribulación y está reunida para el culto, desea reafirmarla en la eficacia de la oración dirigida al Señor. Si sabe esperar en Dios, confiando totalmente en su Palabra, él sin duda escuchará los ruegos. El hecho de orar al Señor no supone que éste preserve al pueblo de las dificultades, sino que en sus angustias experimentará al Dios del éxodo.
La profecía de Isaías es reafirmada por Jesús que prepara la misión de los Doce con el testimonio de su amor compasivo a los enfermos y a quienes sufren; además de su ejemplo de misericordia, invita a los Doce a la oración. La exhortación para rogar al dueño de la mies que mande obreros a su mies es una invitación a compartir la pasión profunda, total, de Jesús por la salvación de la humanidad.
7 diciembre 2024. Textos bíblicos y mensaje del sábado de la I semana de adviento.