Si la sal se vuelve insípida, ¿con qué se le devolverá el sabor?
Con la luz del evangelio de este domingo pensemos en nuestro testimonio cristiano. En ambientes adversos, por su frivolidad, superficialidad, intransigencia, la tentación primera es la de disimular nuestra condición de creyentes. Sucede con los amigos, con los compañeros de trabajo y hasta en la propia familia.
Cuando disimulamos nuestra fe, cuando no permitimos que por nuestras buenas obras Dios sea glorificado somos sal que ha perdido el sabor y luz oculta que no alumbra; cuando esto sucede pierde sentido nuestra vida cristiana, que no se puede reducir ni a una observancia mínima y exterior de ciertas conductas, costumbres o tradiciones, sino que pide de nosotros una mínimo de coherencia que se exprese en la vida fraterna y en la sensibilidad efectiva ante las necesidades del hermano.
05 febrero 2023. Textos bíblicos y mensaje del Domingo de la semana V del tiempo ordinario. Ciclo A.